El comercio electrónico está lejos de ser una novedad en la Argentina. Cerca del 70% de los usuarios locales de Internet han realizado, al menos en una ocasión, una compra vía online. Lo que sí son una novedad y están sujetos al cambio son los hábitos de consumo, a raíz de la cantidad creciente de dispositivos que se utilizan para hacer compras y las nuevas posibilidades que ofrecen plataformas y aplicaciones.

Si bien la computadora de escritorio preserva su reinado (el 90% de los internautas la utilizan para sus compras), la masificación de los teléfonos inteligentes generó el comienzo de un cambio en la forma de consumo.

De acuerdo a los datos que difundió la Cámara Argentina del Comercio Electrónico (CACE), durante la primera mitad del 2018 se registró un crecimiento del 59% de las órdenes de compra en comparación con el período homólogo en el 2017. Estos cambios son impulsados por quienes primeros se adaptan a las nuevas tecnologías y asimilan las nuevas posibilidades que ofrece el mercado tecnológico. Por esta razón, consultoras y empresas especializadas invierten en estudiar los nuevos hábitos que imponen lo jóvenes a la hora de comprar, entendiendo que serán ellos los compradores del mañana.

Conscientes y sin efectivo

Uno de los datos más relucientes que arrojó un informe de la consultora Cassandra es que el 52% de estos consumidores se rige por un presupuesto concreto en sus gastos. En otras palabras, saben hasta dónde pueden gastar. Sin embargo, si bien son compradores conscientes, también gastan sumas considerables de dinero en indumentaria, salud, deporte y comer afuera.

Por otra parte, prefieren prescindir del uso de efectivo. El 73% prefiere pagar con tarjeta de crédito o débito. En Argentina, el uso de las tarjetas de crédito continúa en alza, con un 82% de las preferencias de pago.

Webrooming y showrooming

Otro estudio, elaborado por Urban Land Institute arroja que el 11% de los jóvenes entre 18 y 24 años lleva a cabo una práctica que se denomina “showrooming”. La misma consiste en comparar los productos en las tiendas físicas para finalizar comprando de manera online. La finalidad es buscar el mejor precio. Sin embargo, la comparación de precios no sólo se hace recorriendo tiendas físicas ya que los smartphones son un arma fundamental para realizar esta comparación de productos off-line. De acuerdo con IBM, el 50% de las compras online provienen de esta práctica.

En la senda opuesta hallamos al “webrooming”. Esta última funciona exactamente a la inversa: se consulta la información en Internet para después finalizar la transacción en el negocio físico. Según Urban Lands Institute, el 50% de los jóvenes menores de 35 años recurre a esta modalidad.

Compras desde dispositivos móviles

Por su parte, una investigación que elaboró la consultora Carrier y Asociados en septiembre del último año dejó en evidencia el hábito creciente del celular a la hora de efectuar operaciones de compra. Los centennials, menores de 24 años, compran más por celular que por la PC. Esta tendencia no se condice con el hábito del millennial –de 24 a 35 años- que continúa con cierta preferencia por la computadora.

En términos de logística, la opción de retirar el producto en la tienda experimentó un aumento del 57% mientras que, caso contrario, la entrega a domicilio disminuyó. Además, la tienda virtual Linio realizó un diagnóstico a través del cual aseguró que el 84% de los argentinos buscan descuentos y promociones cuando compran de manera online.