Por Maricel Martinez, coordinadora de Calidad de Procesos en NeuralSoft.

La certificación de calidad y procesos es una experiencia que marca un antes y un después en el quehacer de toda compañía. Poner a disposición y evaluación de terceras partes la forma en la que hacemos nuestro trabajo es todo un desafío. Pero quien confía en su propio esfuerzo y siente pasión por superarse día a día, sabe que camina por el sendero correcto. 

Cuando el foco está puesto en los procesos, productos y servicios se realizan siguiendo estándares definidos, pre-pautados e internalizados por todos los miembros de la organización. Este tipo de estructura permite trabajar de forma tal que los resultados y la satisfacción del cliente no dependen exclusivamente de las personas, sino más bien de los procesos en sí mismos, porque ya se sabe que funcionan y entregan los resultados esperados. Esto hace más fácil la optimización, la gestión del conocimiento y el trabajo cotidiano. Nos permite tener mediciones e informes comparativos en el tiempo, ya que lo que no se puede medir tampoco se puede gestionar. 

Tener los procesos claves definidos, estar abiertos a sugerencias y aportes de mejora en todos los niveles de la organización, medir satisfacción de nuestros clientes, identificar riesgos, definir acciones para prevenir y no sólo para corregir, hacer foco en la capacitación de las personas, tener actualizados en todo momento los indicadores de gestión claves de los procesos, contribuye a superar las expectativas de nuestros clientes y optimizar el trabajo realizado día a día. Todo esto forma parte de nuestra “cultura de calidad” que ha ido creciendo y hoy nos identifica. 

Este reconocimiento es, para nuestros clientes, la confirmación de que seguimos trabajando según nuestros estándares de calidad y que estamos enfocados en mejorar continuamente, apuntando a la excelencia. Que hacemos lo que decimos que hacemos. Además, les brindamos la tranquilidad de que, si ellos tienen que certificar o mantener una certificación, NeuralSoft como proveedora cumple con todos los requisitos de ISO 9001. Estamos avalados con el sello de IRAM, lo que les ahorra tiempo y dinero en la certificación de procesos propios para los cuales el software sea parte primordial (por ej. producción, resguardo y recuperación de las bases de datos y la información, cuidado de las evidencias).

Internamente, podemos comprobar que seguimos en el buen camino de la calidad y la excelencia y demostrar que, efectivamente, todos los que conformamos NeuralSoft trabajamos orientados a los objetivos y contamos con políticas de calidad definidos. Esto es: cumplir con los requerimientos de nuestros clientes y superar sus expectativas, prevenir antes que corregir, capacitarnos. Que la cultura de la calidad está afianzada y contamos con la evidencia de cumplimiento.  

Estar 100% convencidos de que este camino lleva a lograr los mejores resultados y es la piedra fundamental para iniciar este camino. Que lo primordial no es trabajar por la certificación en sí, si no, todo lo que lleva a ella. El compromiso de todos los niveles de la organización es fundamental, y ser conscientes de la importancia y el valor que agrega cada requisito. Que todo lo definido sume realmente al objetivo de la compañía, y que las mediciones vayan demostrando la mejora obtenida. No hacer definiciones sólo para cumplir cada punto de la Norma, sino que sea porque realmente aporte valor. Cualquier empresa con ganas de crecer y madurar puede lograrlo. 

Recomiendo la certificación y el proceso que lleva a ella, porque es un aprendizaje permanente y único y porque contribuye a mirar cada actividad de la empresa desde una visión más completa y analítica, y a madurar los procesos orientados a cumplir los objetivos. El camino que se logra es el de la optimización permanente, enfocada en la satisfacción del cliente.