Si has recibido innumerables elogios por tus cupcakes o recibís solicitudes de amigos para ser su chef personal en ocasiones especiales, un negocio de alimentos en el hogar podría ser una excelente manera de ganar dinero extra mientras hacés algo que disfrutás.

Pero a pesar de que glasear pasteles o embotellar tu salsa de barbacoa casera puede parecer divertido, un negocio de alimentos en el hogar sigue siendo un negocio. Al igual que con cualquier negocio, debes planificar e investigar antes de elegir tu batidora o diseñar etiquetas para tu aderezo para ensaladas.

Aquí hay 10 cosas que debes saber antes de abrir un negocio de comida en tu casa.

1. Conocé las leyes locales

Tu primer paso es determinar las reglas para un negocio de comidas en casa en tu área.  De acuerdo con John Gerber, fundador del bufete de abogados Upstart Legal, puede haber requisitos locales adicionales a considerar, que incluyen zonificación, licencias y permisos comerciales, y requisitos de producción y seguridad para el producto específico que vendés.

“Si no se hacés esto correctamente, se pondrá en peligro la capacidad del negocio para producir y vender productos”, señaló Gerber.

2. Conocé tu mercado

Podrías tener los mejores cupcakes del planeta o el adobo seco más sabroso jamás inventado, pero si no hay un mercado para tu producto, no generarás suficientes ingresos.

La chef Veronica Rains, autora de Sell Your Organic Food Product (Vende tu producto de Alimentos Orgánicos), recomienda hacer focus groups, hacer lotes pequeños con empaques económicos y vender tus productos en algunas tiendas minoristas antes de invertir completamente en el negocio.

3. Manejá tu negocio como una entidad legal

Dado que los negocios de comidas en el hogar a menudo se construyen a partir de un pasatiempo, muchos dueños de negocios de alimentos cometen el error de continuar administrando sus negocios de manera informal. Gerber recomienda formar una LLC o una corporación, además de tener un seguro, mantener las cuentas comerciales separadas de las cuentas personales y registrar todos los productos como marcas comerciales en el nombre del negocio.

“La entidad legal, si se gestiona adecuadamente, mantendrá los pasivos del negocio separados de los activos de los propietarios individuales”, señala Gerber.

4. Contratá profesionales

Si bien es posible que hayas diseñado un sitio web para la asociación de propietarios o hayas tomado una clase de contabilidad en la universidad, considerá cuidadosamente contratar profesionales para tareas que están fuera de tu experiencia principal. Aunque podrías realizar estas tareas, tu tiempo a menudo se puede utilizar mejor para hacer crecer el negocio y el resultado puede ser una operación más fluida y de más rápido crecimiento.

5. Dejá todo por escrito

Para protegerte a vos mismo y a tu negocio, intentá poner por escrito todas las disposiciones sobre relaciones y trabajo por contrato. Esto también es cierto para los amigos y familiares que ayudan a invertir para que tu negocio despegue.

“Si otras personas además del dueño del negocio están involucradas en la creación o preparación del producto, necesitás que le asignen al negocio los derechos de propiedad que puedan tener sobre tu trabajo”, dice Gerber. Estas disposiciones también deberían aplicarse a los proveedores, como los diseñadores de sitios web.

6. Ten una imagen profesional

Incluso si horneás tus productos en pijama mientras tus hijos hacen la tarea en la habitación de al lado, querrás lucir como un negocio establecido. Tomate el tiempo para tener un sitio web profesional y bien diseñado, presencia en las redes sociales, folletos y tarjetas de presentación. El empaque de tu producto también debe comunicar claramente tu marca.

7. Hacé del marketing una prioridad

Muchos dueños de negocio de alimentos asumen que dado que a muchas personas les encanta comer, vender productos alimenticios es fácil. Steve Brodsky, propietario de la compañía de chefs personales 3 Star Chefs, dice que ese es el error más grande que ve que cometen los negocios de alimentos en el hogar. Es vital correr la voz acerca de tu negocio.

“Invertí todo el dinero que puedas en marketing/relaciones públicas/publicidad desde el principio”, dice Brodsky.

8. Priorizá los precios

Dedicá tiempo a investigar productos comparables y determiná sus costos antes de establecer precios. Cuando Myriah Zaytoun, diseñadora de moda y ex propietaria de un negocio de comidas, comenzó a cotizar sus productos en función del costo de los ingredientes, pero no agregaba su tiempo como parte del precio. Rápidamente se dio cuenta de que no todos los trabajos de cocina son iguales.

"No podés obtener ganancias si cobrás $6.000 por un trabajo de horneado que te lleva cuatro horas completar, además del precio de los ingredientes", explicó. "Sin embargo, si ponés precios demasiado altos, corrés el riesgo de alejar a tu cliente base. He aprendido a sopesar cuidadosamente todos los factores antes de fijar el precio de cualquier trabajo”.

9. Tomá en cuenta las fluctuaciones de los ingredientes

Los precios de los artículos que usarás a diario, como harina, mantequilla y huevos, no son estáticos y cambiarán según la economía, la disponibilidad, los factores ambientales y más.

“Cuando fijes el precio de tus productos, dejáespacio para que los precios fluctúen, de modo que puedas hacer frente a los aumentos y simplemente revisarlo semestralmente”, dice Kelly Delaney, propietaria de Cakes for Occasions.

10. Comprá al por mayor

Cuando Delaney estaba comenzando, su objetivo era ahorrar en gastos comprando solo artículos para la próxima semana. Rápidamente se dio cuenta de que, si bien el desembolso financiero era más inicial, ahorraba una cantidad considerable de dinero planificando con anticipación y comprando artículos comunes al por mayor.