American ExpressAmerican ExpressAmerican ExpressAmerican ExpressAmerican Express

Mark Zuckerberg: convicciones del joven padre de Facebook

Retraído, exigente y reflexivo, así es el creador de la red social más famosa del mundo. En su visión, los líderes deben ser juzgados por sus acciones más que por sus palabras. Su pensamiento.

Mark Zuckerberg: convicciones del joven padre de Facebook

Mark Zuckerberg nació en Westchester County, se crió en Nueva York, y con solo 19 años fundó la red social más popular del planeta: Facebook. Con ella, revolucionó la manera en que la gente difunde y consume información. Con una inclinación especial por la programación y la informática, y mientras cursaba sus estudios universitarios en la Universidad de Harvard, Zuckerberg creó la primera versión de la red a la que llamó TheFacebook y en pocos años viralizó su proyecto llevándolo a millones de usuarios en todo el mundo. Hoy, a sus 29 años de edad, Zuckerberg se ha convertido en el multimillonario más joven del planeta, de acuerdo al ranking de la revista Forbes.

En un principio, el proyecto Facebook nació con la intención de unir en red a los estudiantes de la Universidad de Harvard. En sólo dos semanas dos tercios de la población universitaria se habían adherido a la red social, desbordando las primeras previsiones de Zuckerberg. Con la intención de conectar a las personas en todo el mundo y dar oportunidad a cada usuario de manejar la información que cada uno quisiera mostrar, en 2006 la red pasó a convertirse en un fenómeno mundial, con 64 millones de usuarios en países de habla inglesa. Viendo los resultados de la tremenda e impensada adhesión, en 2008 Zuckerberg amplió su mercado habilitando Facebook en español, alemán y francés. 

Una mente privilegiada

Muchos medios definen a Mark Zuckerberg como un joven que desde siempre interactuó poco con los demás, pero que cuando lo hace acostumbra a tomar decisiones indagando en los equipos que dirige. Si bien sus vínculos se limitan a charlas estrictamente laborales, suele involucrar a directivos y analistas en sus estrategias con el fin de tomar una decisión consensuada que unifique criterios diferentes. Acostumbrado a pensar en grande y a crear espacios de interacción y participación virtual, entiende que lo trascendente de Facebook no es “¿qué queremos saber de la gente?, sino ¿qué quieren saber las personas de ellas mismas?”

Capaz de dar grandes privilegios a sus empleados pero también de exigir un perfeccionismo analítico y sobre todo pasión por la labor elegida, Zuckerberg tiene un estilo de gestión pragmática y emprendedora que defiende a la hora de explicar los resultados económicos y sociológicos de Facebook en todo el mundo: “Encuentra algo que te apasione. La gente puede ser muy inteligente o tener habilidades que son aplicables, pero si no creen en ello, entonces no van a trabajar realmente duro. Estoy aquí para construir algo a largo plazo. Cualquier otra cosa es una distracción”.

"La gente puede ser muy inteligente o tener habilidades que son aplicables, pero si no creen en ello, no van a trabajar realmente duro."

u estilo de gestión es emprendedora y orientada, sostiene el mismo Zuckerberg, a “mejorar la vida de las personas a nivel social” homogeneizando vínculos y volviéndolos más abiertos. Por otro lado, entiende que los riesgos son desafíos necesarios para crecer en un mundo que cambia tan rápido. De hecho, asegura que la única estrategia garantizada a fracasar es no tomar riesgos. Otra de sus premisas clave para explicar el fenómeno Facebook es entender al negocio como una empresa: “Si tienes una dirección clara en aquello que estás intentando hacer y grandes personas involucradas en la ejecución de lo que estás intentando hacer, entonces puedes hacerlo bastante bien”.

En la historia, concluye Zuckerberg, no importa lo que opine la gente de un líder, lo que verdaderamente importa y trasciende es lo que ese líder construyó.

No hagas negocios sin ella